lunes, 24 de febrero de 2014

Lo que veo cuando miro. Las plagas




Vio Dios que aquí cada cual iba a lo suyo y que esto se parecía cada vez más a una selva llena de fieras y de gente empobrecida, y no se le ocurrió otra cosa que mandarnos unas plagas, a ver si el personal despertaba y se decidía a hacer las cosas mejor.

Como esta vez no tenía a mano langostas ni langostinos, optó por enviar una crisis a lo grande, para remover todas las estructuras y generar un paro, no sólo laboral, sino también mental, entre la población como nunca se había visto. Por si el castigo fuera poco, pobló Europa de unos especímenes bastante brutos y muy dados al coleccionismo de dinero, a los que llamaban neoliberales. En España se agrupaban bajo las siglas del PP y, gracias a los votos de los que tenían mucho que defender y a la abstención ingenua de otros, se encaramaron al poder. Lo arrasaron todo y pusieron al país de la manera que mejor iba a sus intereses. Para redondear la faena, mandó Dios una plaga de lluvias y vientos, a la que llamaron ciclogénesis explosivas, que dejó el paisaje echado a perder y la moral de los ciudadanos disuelta en agua y por los suelos.


Lo peor de todo esto fue que los daños que ocasionaron estas plagas los pagaron los de siempre, o sea, los ciudadanos menos favorecidos, los que menos responsabilidad tenían en toda esta situación. No sé si alguien aprendió alguna lección de estos desgraciados sucesos. Buenas tardes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes expresar aquí tu opinión.